7 de octubre de 2008

... con risas al final.

Ya lo he dicho en el post anterior, César Rodriguez es uno de mis clásicos. Fue al primero que vi en un escenario de un bar madrileño, y desde entonces todos los años le veo al menos una vez... bueno, en realidad los dos primeros años perdí la cuenta de sus conciertos... pero ahora si, es lo que yo llamo "mi dosis anual de cesar-rodriguismo".

Me gusta como cuenta las cosas... en sus canciones, en sus monólogos entre canción y canción, en sus charlas postconcierto... y en su blog.

Donde leo que ha estado de limpieza y ha encontrado joyas en cassette, y generoso, nos ha regalado una, con risas al final.


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