palabras para Paco Cifuentes

... reflejando mi vida adentro de la suya.

27/11/2009. Paco Cifuentes.
Casa de Canarias. Madrid.

Hace ya tres o cuatro años una amiga me decía que habíamos perdido la capacidad de contarnos las cosas sin apoyo gráfico, que no quería ver las fotos de mi último viaje, sino que se lo transmitiera con palabras... y eso es lo que intento ahora, retratar sin videos, por petición del artista, lo que pasó el pasado viernes en la Casa de Canarias en Madrid.

Aquel mismo día conseguí cartuchos para mi cámara de fotos instantánea, y fue una pena no llevarla al concierto. La filosofía romántica de la polaroid encaja perfecta con lo que allí pasó, la captura del momento irrepetible, imposible de duplicar.

Hacían las veces de escenario una chimenea con la escultura de un busto femenino... altas estanterías repletas de libros hasta el techo, y unas contraventanas blancas. Dos copas de vino reposaban en la mesa. Nosotras sentadas en el suelo, la toma a tierra necesaria... y Paco en un taburete, a contraluz y contrapicado. Garabateo en mi libreta versos de "Tu boca"... "Collage"... "Vestida de domingo"... "Aliviados", con ganas de escuchar ya el nuevo disco... y "Belle de Jour" con recuerdos mágicos de coreografía infantil.

Entre alguna de todas esas se deshace de la guitarra y se viste de vaivén, describiendo una espiral en la que es inevitable colarse. Sus manos desnudas marcan el compás y prenden la candela de nueve velas que huelen a vida, a menta y canela, a tierra mojada... y a sándalo, a nag champa, a India pura.

Otra se quema oliendo a la India,
persiguiendo la canción de tu vida
adentro de la mía, adentro de la mía...

[... y yo persiguiendo canciones, reflejando mi vida adentro de la suya.]