25/04/2010. OOPS! Kevin Johansen + Liniers.
Casa de América - Madrid.
Lo mio con Kevin Johansen viene de lejos. Hace cuatro años hice un segundo ciclo que nada tenía que ver con mi anterior titulación. El primer día de clase un profesor hablaba de una exposición a la que yo había ido, me preguntó, me hizo sentir jilipollas y pensar que él lo era. En la cena de navidad hablamos de música y me recomendó a Kevin Johansen, en cuanto llegué a casa me puse a buscar cosas de él. Empezaron a encantarme sus clases, terminé sacando matrícula de honor. Tiempo después escuchando a Johansen me enamoré. Dejé pasar sus conciertos. Y el viernes pasado gracias a María, por casualidad me enteré de que tocaba en Madrid.
Al margen de todo eso, lo del domingo en la Casa de América fue mucho más que un concierto, todo un espectáculo. Los pinceles de Liniers me hipnotizaban. La fusión y el sentido del humor de Kevin los conocía en disco, tremendos... pero su interpretación en directo lo hace aún mayor.
El momento de la noche fue este... el banjo griego sonaba a sitar, y yo me había pasado la tarde flotando y sin poder mirar a los ojos.
Casa de América - Madrid.
Lo mio con Kevin Johansen viene de lejos. Hace cuatro años hice un segundo ciclo que nada tenía que ver con mi anterior titulación. El primer día de clase un profesor hablaba de una exposición a la que yo había ido, me preguntó, me hizo sentir jilipollas y pensar que él lo era. En la cena de navidad hablamos de música y me recomendó a Kevin Johansen, en cuanto llegué a casa me puse a buscar cosas de él. Empezaron a encantarme sus clases, terminé sacando matrícula de honor. Tiempo después escuchando a Johansen me enamoré. Dejé pasar sus conciertos. Y el viernes pasado gracias a María, por casualidad me enteré de que tocaba en Madrid.
Al margen de todo eso, lo del domingo en la Casa de América fue mucho más que un concierto, todo un espectáculo. Los pinceles de Liniers me hipnotizaban. La fusión y el sentido del humor de Kevin los conocía en disco, tremendos... pero su interpretación en directo lo hace aún mayor.
El momento de la noche fue este... el banjo griego sonaba a sitar, y yo me había pasado la tarde flotando y sin poder mirar a los ojos.
1 comentario:
Genial Jara. Me encanta sentir que he estado "un poquito ahí". Gracias por esos vídeos que nos transportan un poco a los demás. Besos y música
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