Ayer me desperté tarareando, con los pies fríos, sin saber muy bien de que canción se trataba, buscaba la voz del intérprete en mi fichero mental, entre el olor de la tostadora y el humo saliendo de la taza, con legañas en los ojos (preciosa con los párpados hinchados, cómo decía la canción)... cantaba sin saber de quien se trataba... y llegué al estribillo... y sonreí...Ismael siempre vuelve, o yo a él.
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